Me predispongo a acordarme de esta noche y se me vuela la cabeza, con el simple recuerdo.
El bar de Luca siempre me va a hacer acordarme de vos. Ya ahí tenia ganas de locura, completa locura.
A dos cuadras de la 9 de Julio. La suerte juega de nuestro lado, una puerta se abre, la recepción deja entrar al fuego. Habitación 17, mesa, una silla, ropero, mesa de luz, cama, ventana redonda; sisi, era nuestra, la habitación era nuestra.
Cada caricia tuya era un motín de mis sensaciones presas en mi conciencia. No quería que dejaras de tocarme nunca, jamás.
"Es buen guitarrista"
Cuando abrí los ojos vi la imagen de tu cara aturdida por el deseo. Mi respiración ya no era en silencio, sino en vocales.
Descubrí una de las mejores maneras de despertarme, en tus brazos, desnudos, y queriéndote. Creo que tenias las mismas ganas que yo, de no levantarte nunca más de ahí.
Podría mirarte y besarte, acariciarte y mimarte, por mucho tiempo, hasta que vos no quieras más, hasta que el sol deje de salir.
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